Descentralización, moderación y monetización

Vivimos en un momento curioso en cuanto a las grandes plataformas centralizadas, que son, a la vez, muy importantes para nuestra relación con el resto del mundo pero muy problemáticas en cuanto a su monetización o moderación.

Esta entrada es la unión de los tres temas que se plantean en el título, así como la facilidad de uso. Son dos reflexiones publicadas en el fediverso a las que les he dado algo más de forma pero, aunque hacen una reflexión interesante, son más bien pensamientos algo dispersos que un texto bien estructurado con una argumentación o una conclusión claras.

El estado de la centralización

En YouTube no se pueden decir las cosas como son. Palabras como «asesinato, genocidio, suicidio», etc. hacen que el vídeo quede automáticamente demonetizado y los creadores tienen que buscarse las vueltas para decir lo que quieren decir.

Twitch se pone muy exquisito con algunos canales pero otros emiten contenido con copyright todo el día con total impunidad.

Twitter no tiene ningún tipo de moderación desde que lo compró Elon Musk. Se rescataron cuentas ya bloqueadas y el discurso de odio campa a sus anchas junto con personas que solo buscan difundir sus proyectos o informar aprovechando la masa de usuarios que tiene.

Substack tiene newsletter nazis y no hace nada por moderarlas. Al contrario.

En Telegram tenemos a la vez un espacio donde se mueven contenidos con copyright o grupos que difunden bulos (véase el canal de Alvise) junto con personas que lo usan como sistema de comunicación diario.

En TikTok hay mucha gente que solo sube sus vídeos mientras que se leen comentarios abiertamente pedófilos.

Si a esto sumamos las medidas que han tomado desde la llegada al poder de Trump, con Meta despidiendo a verificadores de contenido o permitiendo llamar «enfermo mental» a las personas LGBTIQ+, tenemos nos podemos hacer una idea del estado del asunto.

El modelo de la centralización (y, en buena medida, el de la publicidad) está totalmente roto.

La descentralización tiene sus retos

El problema es que estos son problemas político-tecnológicos que nos planteamos sobre todo quienes ya estamos «fuera del sistema», y que, sin ese modelo de centralización, internet no sería lo que es hoy, para bien y para mal.

Google sirvió para centralizar las búsquedas. Las redes sociales se convirtieron en plaza pública y punto de encuentro. Yo no podría informarme sobre pensamiento de izquierdas de forma tan efectiva si no estuvieran los canales de YouTube que sigo.

El modelo de descentralización que considero parte de la solución a todo esto tiene una serie de barreras de entrada para el usuario básico y dudo que llegue a ser algo mayoritario en algún momento pero, desde luego, este debate sobre el discurso en redes era necesario, llega tarde y a día de hoy dudo que haya una solución clara y accesible a todo el mundo.

Parece que hay que elegir entre centralización y moderación ineficiente pero accesibilidad o descentralización y trato más humano pero mayor dificultad de uso.

Descentralización y moderación

La descentralización puede ser parte de la solución a esto, pero ese carácter descentralizado no garantizan nada de por sí.

El fediverso es descentralizado en dos sentidos: hay muchos servidores de una misma plataforma, pero también hay muchas plataformas. Sin embargo, para muchas personas, «fediverso» es sinónimo de «Mastodon» (hablamos de «toot» en lugar de una palabra más genérica), y «Mastodon» es sinónimo de «mastodon.social» o «mastodon.online», las dos instancias de Eugen, la cabeza visible del proyecto.

Sin embargo, Mastodon.social tiene problemas de moderación porque es demasiado grande. Pero Eugen no cierra los registros para animar a la descentralización. Podemos pensar que el objetivo de Mastodon como proyecto, con sus abismales diferencias, también es ese crecimiento desmesurado propio de las grandes tecnológicas. Ir donde corresponda demostrando la cantidad de usuarios que tiene.

¿Dónde quedan Firefish, Akkoma, Pixelfed, PeerTube? Son plataformas del fediverso que conocemos quienes ya tenemos cierto conocimiento, pero no se promocionan.

No quiero decir que X y Mastodon.social sean lo mismo ni muchísimo menos. X es centralizado, su único objetivo es ganar dinero y Musk despidió a todo su equipo de moderación. Pero sí me resulta llamativo que Mastodon.social tenga problemas de moderación por lo grande que es.

Antiguamente los canales IRC y los foros, aunque fueran grandes y siempre hubiera broncas, eran moderados por personas o grupos de personas. Lo mismo ocurre con las instancias pequeñas del fediverso.

La centralización lleva al descontrol en cuanto a la moderación cuando se alcanza cierto volumen de usuarios, y las tecnologías descentralizadas no son garantías de nada si no se limita su crecimiento.

Por lo tanto, sí, creo que la descentralización es el camino, pero debemos tener claro que ese carácter descentralizado es lo más importante. No Mastodon en sí o cualquier otra plataforma particular. Un internet descentralizado y manejable.

Si mantenemos esta descentralización y un crecimiento controlado, por supuesto que se nos colarán bulos y nazis, pero será más fácil de situar. Igual que muchas instancias deciden silenciar mastodon.online por esos problemas de moderación, si nace un grupo de instancias centradas en difundir mensajes de odio, el resto de la comunidad puede actuar en consecuencia. Los bulos, la pedofilia y otros comportamientos despreciables siempre se abrirán paso, pero en un internet descentralizado es mucho más fácil detectarlos y señalarlos.

Si tecnologías como el fediverso o XMPP crecieran hasta el nivel de X o Telegram, desde luego que habría muchos retos, diferentes a los de la centralización. Pero creo que la descentralización es el camino para tener un internet más sano.

Descentralización y monetización

Esto es un análisis que no busca llorar por el estado de internet. Yo uso el internet descentralizado todo lo que puedo, y animo a quien me lee a hacer lo mismo. Pero el poder individual que tengo es mínimo en comparación con un YouTube, un Twitch o una televisión que muy difícilmente va a recomendar unas herramientas que, ahora mismo, van en contra de su modelo de negocio.

No hay publicidad en ellas.

El modelo de la publicidad ha sido criticado muchas veces, desde hace mucho tiempo, pero parece que otras alternativas, como las donaciones o las suscripciones, no son del gusto de los usuarios, o de todos los usuarios. Al menos, las suscripciones tal y como se plantean ahora. Y no me corresponde a mí proponer soluciones a esto.

Puedo imaginarme un futuro descentralizado, pero no soy capaz de imaginarlo descentralizado y monetizado según los marcos de ahora. Habrá que buscar otras maneras si queremos que siga habiendo personas que se ganen la vida con la red y lo hagan de manera más ética.

Por concluir

Insisto en que esto no es un texto bien estructurado ni busca una conclusión clara. De hecho, escribo estas últimas líneas muchos meses después de que los mensajes originales fueran publicados en mi perfil de Mastodon.

Si algo quiero decir con esta entrada es que el internet descentralizado me parece el camino más lógico, y casi el único, para seguir disfrutando de una red medianamente sana y en la que sea más sencillo establecer relaciones reales entre personas. Pero este futuro utópico tiene muchos retos por delante, retos que debemos plantearnos ya si queremos dar respuesta a tantas necesidades.

Y es apasionante.

Categorías:

Una respuesta

  1. Un internet realmente descentralizado seria uno en el que cada cliente sea a su vez, servidor. Debido a lo monstruoso que esto seria, la alternativa, el fediverso, es solo un internet segmentado en pequeñas centralizaciones. Los problemas de discurso de odio y cosas ilegales, tanto en el centralizado como en el fediverso recaen en algún moderador. O sea, tenemos que esperar a que alguien decida si tal cosa es mala y la borre. pero en todas las plataformas el usuario final puede bloquear y borrar lo que no quiere ver. No creo que haya una solución cercana, pero son buenos pensamientos.

Responder a drk0027 Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *