Pongámonos en la remota posibilidad de que quieres empezar un blog. Las opciones más típicas son Blogger o WordPress, normalmente en su versión como servicio. Pero, ¿y si te digo que hay opciones mucho más sencillas? Diré más: son tan sencillas que te sentirás insultado cuando las descubras.

Mataroa

Mataroa ofrece un blog totalmente gratuito sin publicidad, sin seguimiento del lector y con comentarios (aunque esto es algo problemático).

Es gratuito y pagando la ridiculez de 9 dólares al año permite acceder a alguna chuchería.

Las dos únicas posibles dificultades son que la interfaz está en inglés (pero vamos, son 20 palabras casi literalmente) y que las entradas se escriben en Markdown, un lenguaje de marcado que se aprende en 10 minutos.

Bearblog

Bearblog fue la inspiración para Mataroa. También es extremadamente simple y da más opciones de personalización en las plantillas. Pero no tiene comentarios.

Totalmente gratuito y con un lector para descubrir entradas populares.

Las entradas también se escriben con Markdown. La única complicación es que quizás sea necesario introducir algunos datos en las entradas para hacer alguna virguería, lo cual requiere leer un poco la documentación. In inglis, of cors.

WriteFreely

Los blogs de WriteFreely también se pueden crear muy fácilmente, también se escribe con Markdown y también crea páginas simples y vistosas.

Tiene el añadido chachi de que es una cuenta del fediverso, pero eso a ti no te debe importar. Tú créate un blog.

Se puede pedir cuenta en muchos sitios o crear cuenta en Write.as, el servicio que ofrecen los desarolladores, con versión gratuita y de pago por 6 dólares al mes.

Blot

Blot es muy sencillo. ¿Tienes una cuenta de Dropbox o Google Drive? Puedes conectar una carpeta con Blot para convertir los archivos que sueltas dentro (ya sea Markdown, texto plano o imágenes) en páginas de un blog, muy simple pero muy bonito.

Aquí no hace falta aprender Markdown. Eso sí, vale 4 dólares al mes y hay que leer documentación para hacer las cosas bien, también en inglés.

El desarrollador es tan majo que hasta mantiene una lista de alternativas a su propio servicio, lo cual incluye a…

Montaigne

Montaigne es más simple aún. ¿Tienes un dispositivo Apple? Entonces tienes Apple Notas. Creas una carpeta en la aplicación, te registras, conectas la aplicación con Montaigne y publicas. Ya.

Está en inglés, pero es que vas a usar la aplicación de Notas. Y encima es gratis.

Conclusión

Crear un blog en alguno de estos servicios te lleva, literalmente, un minuto.

Te vi llorando el otro día porque ibas a perder tus maravillosos hilos de un Twitter que se cae a pedazos.

Ya no tiene excusas para abrir un blog y copiarlo todo ahí.

Es muy fácil. Es insultantemente fácil.

Corre. Rápido, antes de que Elon Musk decida que en Twitter no se pueda copiar.