Creación: ¿Un esmar qué?

—¡Hombre, Juan! Veo que has cambiado de móvil. Y no veas qué bicharraco te has comprado. Te ha tenido que salir por un ojo de la cara, ¿no?
—Calla, calla, que yo los cacharros estos ni los entiendo ni nada. Pero claro, te llaman los de Naranje, con esas muchachas extranjeras con la voz tan bonita y que dicen palabras tan raras que al final acabas picando.
—¿Pero cómo te vas a comprar un móvil que no sabes usar? ¿No tenían algún otro que se adapte más a tus necesidades?

—¡Pues como para preguntar! Si la señorita hablaba rapidísimo, y encima yo no le entendía nada. «Si se viene usted a Naranje le ofrecemos un esmarfon Sansun Galaxia con una pantalla de seiscomacuatro pulgadas caspacitiva conexión a internet sistema operativo Juandroid lo que le permite instalar cienes y cienes de aplicaciones se podrá usted comunicar con sus amigos de manera fácil con nuestra tarifa Ornitorrinco Setentaydos que por ochenta y cinco euros al mes IVA incluido podrá navegar hasta alcanzar los cien megas tras lo cual le cobraremos noventa y cuatro euros y todo esto por sólo veinticinco meses de permanencia, ¿está usted interesado?».
—¡Hala, qué barbaridad, noventa y cuatro euros! ¿Y cómo es que le dijiste que sí, alma de cántaro?
—¡Ya te digo que yo a la muchacha no le entendía la mitad, entre esmar lo que sea y caspacitiva! Yo lo que sé es que me dijo que tenía Juandroid, que se parece a mi nombre, y supuse que me podría poner el Quépasapp que es lo que tiene ahora todo el mundo, que te ves tú a las chavalitas hasta en los teatros mirando el móvil por el Quépasapp.
—Pero hombre de dios, si yo estoy en JosemariaPhone y pago siete euros al mes por quinientos megas…
—¿Y entonces por qué no me aconsejaste, con lo que entiendes tú de estas cosas?
—¡Si eres tú el que me ha dicho siempre que a ti estos móviles no te interesan!
—Pues nada hombre, tendré que pagar los ochenta y cinco euros, porque yo no me pienso pasar de los cien megas para que me cobren a mí noventa y cuatro, ¡pues menudo soy yo!, ¡con timos a mí!

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5 respuestas

  1. Posibles moralejas:

    1. Al final todo el mundo acaba sucumbiendo ante estas modas, aun habiendo sido siempre tan reacio a ello.
    2. Algunas personas se meten en ciertos follones sin ni siquiera saber qué es lo que están haciendo.
    3. Estas complicaciones de los «esmar-qué» y todos esos tecnicismos pueden llegar a ser un serio problema. Y como en el punto 2, la gente compra cosas sin saber ni lo que compra.
    4. Lo fácil que es convencer a la gente con una simple voz bonita aunque no sepan ni lo que les estás diciendo XD.

    1. Adrián Perales

      Si has podido sacar cuatro moralejas de un texto tan cortito, yo me doy por satisfecho, ¡gracias por comentar y compartirlas!

      1. Tampoco sé si la intención era escribir un texto con sus moralejas, o si es simplemente una anécdota en plan humorístico, o qué es exactamente. Pero tengo siempre la manía de buscarle este tipo de significados educativos o reflexivos a casi todo, tanto en los textos como en dibujos, cuadros, cortos, películas y casi todo tipo de arte :D.

  2. Me has conquistado con la tarifa ornitorrinco… Jajajaj. Muy bueno el texto, la verdad. Me ha sacado una sonrisa, aunque bien es cierto que a mí en mi compañía (que es la misma que la de este señor) me han dado coba como a un chino… Vamos, que en cuanto acabe el contrato se van a ir a tomar viento fresco!

    1. Adrián Perales

      Me alegro de que te haya gustado y te hayas reído, esa es la idea. Seguro que te llamó alguna señorita que hablaba rápido jejeje, ¡gracias por tu comentario!

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