Hace unos días fui al dentista después de cuatro años. Y fui asustado porque iba después de cuatro años. Tengo sensibilidad en algunos dientes y me sentía culpable por aquello de “hay que hacerse una limpieza cada año”.

Por suerte, el dentista al que voy no es franquicia.

“Tienes la boca perfecta. Compra tal pasta que tienes sensibilidad porque la encía ha retraído por la edad y por la forma en que te lavas la boca” “¿Cómo? ¿Pero no dicen que hay que hacer una limpieza al año?” “Anda ya, eso es para sacarte el dinero. Tienes un poco de sarro blanco en los incisivos, mientras no sea negro no merece la pena tocarte”.

Y yo con cara de póker. Pensaba dejarme un pastón y la visita me salió gratis.

Llevo ya unos cuantos ámbitos en los que me pasa lo mismo.

Podólogo. Voy con la idea de quitarme durezas y un ojo de gallo que me ha salido. “Tienes que mejorar tu forma de caminar” “¿Mande?” “Te podría quitar las durezas, ese ojo de gallo, cobrarte 30, 40 o 50 euros y mandarte a casa. Pero queremos solucionar el problema de raíz, ¿no? Pues a mejorar tu forma de caminar”. He estado en otros podólogos en los que me hicieron justo eso: cortar uñas, quitar durezas y cobrarme. Este al que voy ahora es podólogo-posturólogo.

Dietista. Voy con la idea de hacer la típica restrictiva. “Eso es malísimo. Tienes que aprender a comer bien. Te voy a enseñar a comer” “¿Qué?” “Que no te voy a mandar una dieta cerrada sino que te voy a dar una dieta de menú para que veas lo que debes poner en cada plato para comer mejor y perder peso de forma sana”.

Entrenador. Voy con la idea de coger peso como un campeón y me pone a hacer ejercicios muy básicos de movilidad, llevo casi un año y apenas he cargado peso. Estoy en mejor forma que nunca.

Quiero pensar que estoy cuadrando con profesionales que están actualizados y que hacen las cosas bien, porque yo me he hecho limpiezas anuales, me han cobrado por cortarme las uñas y quitar durezas, he hecho dietas restrictivas y he cogido peso como un campeón. Quiero pensar.

Y es que, al final, es difícil saber qué profesional está actualizado y qué precios están justificados. Yo solo me puedo guiar por mis sensaciones, y estoy muy contento con estos profesionales que he encontrado.