Expresiones religiosas

La sociedad española cada vez es menos religiosa, pero hay algo propio de la religión que aún nos acompaña en nuestro día a día y que será muy difícil abandonar.

Las expresiones.

Es impresionante lo implantadas que están en nuestro lenguaje cotidiano. Yo no soy creyente y me es inevitable decir «por Dios», «Dios no lo quiera», «¡Santo Dios!», «¡Dios mío de mi vida!» «¡la Virgen!» y tantísimas otras.

Alguna vez he leído sobre expresiones con animales (qué curioso que normalmente sea para insultar a una mujer, ¿verdad?: «estás como una vaca»), pero no recuerdo haberme cruzado con nadie que reflexionara sobre este asunto.

Y es que las expresiones religiosas están tan arraigadas y tienen tanto carácter y (valga la redundancia) expresividad, que veo muy difícil apartarlas de nuestro día a día.

No sé si el tiempo me quitará la razón. Ya os contaré. O no.

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2 respuestas

  1. undefined

    Te olvidas de la contraparte anti-religiosa o «blasfema», que está también tan implantada que aunque no seamos creyentes las decimos sin ningún ánimo ofensivo o anti-religioso sino simplemente «por cabreo», como el clásico «me cago en Dios», o su versión aún más intensa: «me cago en Dios y en su puta madre».

    Pienso como tú: estas expresiones, como tantas otras cosas del lenguaje o de otros mundillos (por ejemplo el nombre de los planetas basados en antiguos «dioses paganos») está ahí para quedarse pero sin tener el tema religioso ninguna importancia en ello más allá del origen. Si acaso sustituidas a veces «en plan coña» por otras religiones o creencias, como cambiar Dios por Odín, que lo he visto mucho en cierto ámbitos frikis y es algo que yo mismo hago alguna que otra vez.

    1. A mí me encanta «Me cago en la virgen puta». Es maravilloso. Buen comentario, gracias por pasarte.

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