A finales de 2018 me hice con un robot aspirador. Concretamente, un Cecotec Conga 3090. Por aquel entonces estaba muy de moda el robot de Xiaomi, pero era imposible adquirirlo en España y yo preferí apoyar el producto local.

Qué maravilla de aparato. Debido a mi problema visual me suele ocurrir que siempre me dejo alguna parte de la casa sin barrer o sin fregar bien, y este invento viene a echarme una buena mano con este asunto.

Por supuesto, uno no puede ni debe confiar toda la limpieza del suelo a este cacharro. Nada superará la limpieza que deja un buen fregado con mimo, pero para un mantenimiento diario es más que suficiente.

Hay ciertas tareas domésticas que me cuestan mucho trabajo. El suelo es una de ellas, y ya con este aparatito lo llevo bastante mejor. Ahora solo falta que saquen un robot que facilite el planchado. Están en ello, pero todavía tardará en llegar a los hogares. No veo el momento.