Sigo con el repasito de los videojuegos que he completado recientemente. Este ‘Inside’ es de los creadores de ‘Limbo’ y, al contrario que aquel, me ha gustado muchísimo. Este es el segundo que completé en marzo.

El juego es muy parecido al anterior. Avance lateral hacia la derecha, plataformas y acertijos sencillos. Un niño parece escapar de un laboratorio y se esconde de adultos y animales que buscan atraparlo.

La historia es igual de obtusa que la de ‘Limbo’. La única diferencia es que el ambiente postapocalíptico-distópico hizo click conmigo desde el primer momento. En este tampoco se explica absolutamente nada de la historia, hay que fijarse en los escenarios para hacerse una idea de qué está ocurriendo.

(En los siguientes párrafos hablo un poco de las sensaciones que me dejó el final)

Acabé el videojuego con una sensación de desasosiego y de tristeza. No entendía por qué el personaje actuaba como lo hacía y qué lo lleva a esa resolución. Pero sabía que eso no es un final feliz.

A veces no es necesario tener una explicación certera y exacta en la cabeza para disfrutar algo. El juego me gustó simplemente con esas sensaciones vagas.

Evidentemente entré en YouTube para que me dieran alguna interpretación de la historia y me encontré con una explicación de Leyendas y videojuegos que lo deja todo muy bien atado.

Y el juego me gustó aún más.

Todos esos elementos que había visto se conectaron sin problemas y pude tener la pintura completa de toda la historia que el juego propone.

(Ya no hablo más del final)

Es una experiencia muy cortita, igual que ‘Limbo’, pero mientras aquel me decepcionó por las expectativas y una historia con la que no conecté, ‘Inside’ me ha enamorado teniendo exactamente las mismas bases.

Juegos como este demuestran que los videojuegos pueden contar historias alucinantes a través de sus mecánicas sin necesidad de poner cinemáticas de veinte minutos.